martes, 6 de octubre de 2020

281 LECCIÓN

Nada, excepto mis propios pensamientos, me puede hacer daño. 

1. Padre, Tu Hijo es perfecto. 2 Cuando pienso que algo o alguien me ha hecho daño, es porque me he olvidado de Quién soy y de que soy tal como Tú me creaste. 3 Tus Pensamientos sólo pueden proporcionarme felicidad. 4 Si me siento triste, herido o enfermo, es porque he olvidado lo que Tú piensas, y he implantado mis absurdas ideas en el lugar donde a Tus Pensamientos les corresponde estar y donde están. 5 Nada, excepto mis propios pensamientos, me puede hacer daño. 6 Los pensamientos que pienso Contigo sólo pueden bendecir. 7 Los pensamientos que pienso Contigo son los únicos que son verdad. 

2. Hoy no me haré daño a mí mismo, 2 pues me encuentro mucho más allá de cualquier dolor. 3 Mi Padre me puso a salvo en el Cielo y vela por mí. 4 Y no quiero atacar al Hijo que Él ama porque lo que Él ama es mío para que yo también lo ame.

No hay comentarios:

Publicar un comentario