No se me pide hacer ningún sacrificio para encontrar la Misericordia y la Paz de Dios.
1. El final del sufrimiento no puede suponer una pérdida. 2 Darlo todo tan sólo puede aportar ganancias. 3 Tú sólo
das. 4 Nunca quitas. 5 Y me creaste para que fuese como Tú, de modo que cualquier sacrificio es algo tan
imposible para mí como lo es para Ti. 6 Yo también no puedo sino dar. 7 Y así, todas las cosas me son dadas
para siempre. 8 Aún soy tal como fui creado. 9 Tu Hijo no puede hacer sacrificios, pues es íntegro, al ser su
función completarte a Ti. 10 Soy íntegro por ser Tu Hijo. 11 No puedo perder, pues sólo puedo dar, y así, todo
es mío eternamente.
2. La Misericordia y la Paz de Dios son gratuitas. 2 La salvación no cuesta nada. 3 Es un regalo que se debe dar y
recibir libremente. 4 Y esto es lo que queremos aprender hoy.
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