1. Este curso es muy simple. 2 Quizá pienses que no necesitas un curso que en última instancia enseña que sólo la realidad es verdad. 3 Pero ¿crees realmente esto? 4 Cuando percibas el mundo real, reconocerás que no lo creías. 5 Mas la rapidez con la que tu nueva y única percepción real se convertirá en conocimiento no te dejará más que un instante en el que darte cuenta de que solamente eso es verdad. 6 Y luego todo lo que inventaste pasará al olvido, lo bueno y lo malo, lo falso y lo verdadero. 7 Pues cuando el Cielo y la tierra se vuelvan uno dejarás de ver incluso el mundo real. 8 El mundo no acabará destruido, sino que se convertirá en el Cielo. 9 Lo que constituye la reinterpretación del mundo es la transferencia de toda percepción a Conocimiento.
miércoles, 11 de mayo de 2022
VIII. El problema y la respuesta
1. Este curso es muy simple. 2 Quizá pienses que no necesitas un curso que en última instancia enseña que sólo la realidad es verdad. 3 Pero ¿crees realmente esto? 4 Cuando percibas el mundo real, reconocerás que no lo creías. 5 Mas la rapidez con la que tu nueva y única percepción real se convertirá en conocimiento no te dejará más que un instante en el que darte cuenta de que solamente eso es verdad. 6 Y luego todo lo que inventaste pasará al olvido, lo bueno y lo malo, lo falso y lo verdadero. 7 Pues cuando el Cielo y la tierra se vuelvan uno dejarás de ver incluso el mundo real. 8 El mundo no acabará destruido, sino que se convertirá en el Cielo. 9 Lo que constituye la reinterpretación del mundo es la transferencia de toda percepción a Conocimiento.
martes, 10 de mayo de 2022
VII. La condición de la realidad
1. El mundo que percibes no pudo haber sido creado por el Padre, pues el mundo no es como tú lo ves. 2 Dios creó únicamente lo eterno, y todo lo que tú ves es perecedero. 3 Por lo tanto, tiene que haber otro mundo que no estás viendo. 4 La Biblia habla de un nuevo Cielo y de una nueva tierra, mas esto no puede ser cierto en un sentido literal, pues lo que es eterno no puede volver a ser creado. 5 Percibir de manera diferente es sencillamente percibir de nuevo, lo cual implica que antes, o en el ínterin, no estabas percibiendo en absoluto. 6 ¿Cuál es entonces el mundo que le espera a tu percepción cuando finalmente lo veas?
lunes, 9 de mayo de 2022
VI. El despertar a la redención
1. Es imposible no creer en lo que ves, pero es igualmente imposible ver lo que no crees. 2 La percepción se construye sobre la base de la experiencia, y la experiencia conduce a las creencias. 3 La percepción no se estabiliza hasta que las creencias se cimientan. 4 De hecho, pues, lo que ves es lo que crees. 5 Eso es lo que quise decir con: “Dichosos los que sin ver creyeron”, pues aquellos que creen en la resurrección la verán. 6 La resurrección es el triunfo definitivo de Cristo sobre el ego, no atacándolo, sino transcendiéndolo. 7 Pues Cristo ciertamente se eleva por encima del ego y de todas sus “obras”, y asciende hasta el Padre y Su Reino.
domingo, 8 de mayo de 2022
V. La “dinámica” del ego
enlace a "la función del obrador de Milagros"
1. Nadie puede escapar de las ilusiones a menos que las examine, pues no examinarlas es la manera de protegerlas. 2 No hay necesidad de sentirse amedrentado por ellas, pues no son peligrosas. 3 Estamos listos para examinar más detenidamente el sistema de pensamiento del ego porque juntos disponemos de la lámpara que lo desvanecerá, y puesto que te has dado cuenta de que no lo deseas, debes estar listo para ello. 4 Mantengámonos en calma al hacerlo, pues lo único que estamos haciendo es buscar honestamente la verdad. 5 La “dinámica” del ego será nuestra lección por algún tiempo, pues debemos primero examinarla para poder así ver más allá de ella, ya que le has otorgado realidad. 6 Tranquilamente desvaneceremos juntos este error, y después miraremos más allá de él hacia la verdad.
2. ¿Qué es la curación sino el acto de despejar todo lo que obstaculiza el Conocimiento? 2 ¿Y de qué otra manera puede uno disipar las ilusiones, excepto examinándolas directamente y sin protegerlas? 3 No tengas miedo, por lo tanto, pues lo que estarás viendo es la fuente del miedo, y estás comenzando a darte cuenta de que el miedo no es real. 4 Te das cuenta también de que sus efectos se pueden desvanecer sólo con que niegues su realidad. 5 El siguiente paso es, obviamente, reconocer que lo que no tiene efectos no existe. 6 Ninguna ley opera en el vacío, y lo que no lleva a ninguna parte no ha ocurrido. 7 Si la realidad se reconoce por su extensión, lo que no conduce a ninguna parte no puede ser real. 8 No tengas miedo de mirar al miedo, pues no puede ser visto. 9 La claridad, por definición, desvanece la confusión, y cuando se mira a la obscuridad a través de la luz, ésta no puede por menos que disiparla.
3. Comencemos esta lección acerca de la “dinámica del ego” dándonos cuenta de que la expresión en sí no significa nada. 2 Dicha expresión encierra una contradicción intrínseca que la priva de todo sentido. 3 ”Dinámica” implica el poder para hacer algo, y toda la falacia de la separación radica en la creencia de que el ego tiene el poder de hacer algo. 4 Tienes miedo del ego porque crees eso. 5 No obstante, la verdad es muy simple: 6 Todo poder es de Dios. 7 Lo que no procede de Él no tiene el poder de hacer nada.
4. Cuando observamos al ego, por lo tanto, no estamos examinando ninguna dinámica, sino tan sólo ilusiones. 2 Puedes ciertamente examinar un sistema ilusorio sin miedo, pues si su origen no es real no puede tener efectos. 3 El miedo se vuelve claramente más impropio si reconoces el objetivo del ego, el cual está tan obviamente desprovisto de sentido que cualquier esfuerzo en su favor es, por fuerza, inútil. 4 El objetivo del ego es claramente alcanzar su propia autonomía. 5 Desde un principio, pues, su propósito es estar separado, ser autosuficiente e independiente de cualquier poder que no sea el suyo. 6 Por eso es por lo que es el símbolo de la separación.
5. Toda idea tiene un propósito, y su propósito es siempre el resultado natural de lo que dicha idea es. 2 Todo lo que procede del ego es lo que resulta naturalmente de su creencia central, y la manera de cancelar sus resultados es reconociendo simplemente que la fuente de éstos no es natural, ya que está en desacuerdo con tu verdadera naturaleza. 3 He dicho anteriormente que ejercer la voluntad en oposición a Dios es querer que los deseos ilusorios se hagan realidad, pero eso no es realmente ejercer la voluntad. 4 Su Voluntad es Una porque la Extensión de Su Voluntad no puede ser diferente de Ella. 5 El verdadero conflicto que experimentas, por lo tanto, es entre los deseos vanos del ego y la Voluntad de Dios, que tú compartes con Él. 6 ¿Cómo iba a ser eso un conflicto real?
6. Tuya es la independencia de la Creación, no la de la autonomía. 2 Tu función creadora radica en tu completa dependencia de Dios, Quien comparte Su Función contigo. 3 Al estar dispuesto a compartirla, se volvió tan dependiente de ti como tú lo eres de Él. 4 No le adscribas la arrogancia del ego a Aquel cuya Voluntad no es ser independiente de ti. 5 Él te ha incluido en Su Autonomía. 6 ¿Puedes realmente creer que la autonomía significa algo aparte de Él? 7 La creencia en la autonomía del ego te está costando el conocimiento de tu dependencia de Dios, en la cual reside tu libertad. 8 El ego considera cualquier dependencia como una amenaza, e incluso ha tergiversado tu añoranza de Dios y la ha convertido en un medio para consolidarse a sí mismo. 9 Pero no te dejes engañar por la interpretación que hace de tu conflicto.
7. El ego siempre ataca en defensa de la separación. 2 Al creer que tiene el poder de hacerlo no hace otra cosa, ya que su objetivo de autonomía no es otra cosa. 3 El ego está totalmente confundido con respecto a la realidad, pero no pierde de vista su objetivo. 4 Está mucho más alerta que tú porque está completamente seguro de su propósito. 5 Tú estás confundido porque no reconoces el tuyo.
8. Debes reconocer que lo que menos quiere el ego es que te des cuenta de que le tienes miedo. 2 Pues si el ego pudiera producir miedo, ello menoscabaría tu independencia y debilitaría tu poder. 3 Sin embargo, su único argumento para que le seas leal es que él puede darte poder. 4 Si no fuera por esta creencia no le escucharías en absoluto. 5 ¿Cómo iba a poder, entonces, seguir existiendo si te dieses cuenta de que al aceptarlo te estás empequeñeciendo y privándote a ti mismo de poder?
9. El ego puede permitir, y de hecho lo hace, que te consideres altanero, incrédulo, frívolo, distante, superficial, insensible, desapegado e incluso desesperado, pero no permite que te des cuenta de que realmente tienes miedo. 2 Minimizar el miedo, pero no des-hacerlo, es el empeño constante del ego, y es una capacidad para la cual demuestra ciertamente gran ingenio. 3 ¿Cómo iba a poder predicar separación a menos que la reforzase con miedo? a¿ Y le seguirías escuchando si reconocieras que eso es lo que está haciendo?
10. La más seria amenaza para el ego, pues, es que te des cuenta de que cualquier cosa que parezca separarte de Dios es únicamente miedo, sea cual sea la forma en que se manifieste e independientemente de cómo el ego desee que lo experimentes. 2 Su sueño de autonomía se estremece hasta su raíz cuando cobras conciencia de esto. 3 Pues si bien puedes tolerar una falsa idea de independencia, no aceptarías el costo en miedo que ello supone una vez que lo reconocieras. 4 Pero ése es su costo y el ego no puede reducirlo. 5 Si pasas por alto el amor estás pasándote por alto a ti mismo, y no podrás sino tener miedo de la irrealidad porque te habrás negado a ti mismo. 6 Al creer que tu ataque contra la verdad ha tenido éxito, creerás que el ataque tiene poder. 7 Dicho llanamente, pues, te has vuelto temeroso de ti mismo. 8 Y nadie quiere encontrar lo que cree que le destruiría.
11. Si el objetivo de autonomía del ego se pudiera lograr, el propósito de Dios podría ser truncado, y eso es imposible. 2 Solamente aprendiendo lo que es el miedo puedes por fin aprender a distinguir lo posible de lo imposible y lo falso de lo verdadero. 3 De acuerdo con las enseñanzas del ego, su objetivo se puede lograr, pero el propósito de Dios no. 4 De acuerdo con las enseñanzas del Espíritu Santo, únicamente el propósito de Dios se puede lograr, y ya se ha logrado.
12. Dios depende de ti tanto como tú de Él porque Su Autonomía incluye la tuya y, por lo tanto, está incompleta sin ella. 2 Sólo puedes establecer tu autonomía identificándote con Él y llevando a cabo tu función tal como es en verdad. 3 El ego cree que alcanzar su objetivo es la felicidad. 4 Pero te ha sido dado conocer que la función de Dios es la tuya y que la felicidad no se puede encontrar aparte de vuestra Voluntad conjunta. 5 Reconoce únicamente que el objetivo del ego, que tan diligentemente has perseguido, no te ha aportado más que miedo, y se hará muy difícil mantener que el miedo es felicidad. 6 Respaldado por el miedo, esto es lo que el ego quiere que creas. 7 Pero el Hijo de Dios no está loco y no lo puede creer. 8 De reconocer esto, no lo aceptaría, 9 pues sólo un loco elegiría el miedo en lugar del amor y sólo un loco podría creer que atacando es como se alcanza el amor. 10 Pero el que ha sanado se da cuenta de que sólo el ataque, del que el Amor de Dios lo protege completamente, puede producir miedo.
13. El ego analiza; el Espíritu Santo acepta. 2 Sólo por medio de la aceptación se puede llegar a apreciar la plenitud, pues analizar significa fragmentar o separar. 3 Tratar de entender la totalidad fragmentándola es, claramente, el enfoque típicamente contradictorio que el ego utiliza para todo. 4 El ego cree que el poder, el entendimiento y la verdad radican en la separación, y que para establecer esta creencia tiene que atacar. 5 Al no darse cuenta de que es imposible establecer esa creencia, y obsesionado por la convicción de que la separación es la salvación, el ego ataca todo lo que percibe, desmenuzándolo en partes pequeñas y desconectadas sin ninguna relación significativa entre sí y, desprovistas, por lo tanto, de todo significado. 6 El ego siempre substituirá lo que tiene significado por el caos, pues si la separación es la salvación, la armonía es una amenaza.
14. Las interpretaciones que el ego hace de las leyes de la percepción son, y no pueden sino ser, exactamente lo opuesto a las del Espíritu Santo. 2 El ego se concentra en el error y pasa por alto la verdad. 3 Hace que todos los errores que percibe sean reales, y concluye—utilizando su razonamiento típicamente circular—que la idea de una verdad consistente no tiene sentido por razón de los errores. 4 El siguiente paso, entonces, es obvio. 5 Si la idea de una verdad consistente no tiene sentido, la inconsistencia tiene que ser verdad. 6 Teniendo muy presente el error y protegiendo lo que ha hecho “real”, el ego procede al siguiente paso en su sistema de pensamiento: el error es real y la verdad es un error.
15. El ego no trata de comprender esto, lo cual es obviamente incomprensible, pero trata por todos los medios de demostrarlo y eso es lo que hace constantemente. 2 Valiéndose del análisis para atacar el significado, el ego logra pasarlo por alto, y lo que le queda es una serie de percepciones fragmentadas que unifica en beneficio propio. 3 Esto se convierte, entonces, en el universo que él percibe. 4 Y es este universo lo que a su vez se convierte en la demostración de su realidad.
16. No subestimes el poder de atracción que las demostraciones del ego ejercen sobre aquellos que están dispuestos a escucharle. 2 La percepción selectiva escoge sus testigos cuidadosamente, y el testimonio de esos testigos es congruente. 3 Los argumentos en favor de la locura son convincentes para los locos, 4 pues todo razonamiento concluye allí donde comienza, y no hay sistema de pensamiento que pueda trascender su propia fuente. 5 Aun así, el razonamiento que carece de sentido no puede demostrar nada, y aquellos a quienes convence no pueden sino estar engañados. 6 ¿Cómo iba a poder el ego enseñar verdaderamente cuando pasa por alto la verdad? 7 ¿Cómo iba a poder percibir lo que ha negado? 8 Sus testigos dan testimonio de su negación, pero no de lo que ha negado. 9 El ego mira de frente al Padre y no lo ve, pues ha negado a Su Hijo.
17. ¿Te gustaría recordar al Padre? 2 Acepta a Su Hijo y Lo recordarás. 3 No hay nada que pueda demostrar que Su Hijo es indigno, pues no hay nada que pueda probar que una mentira es verdad. 4 Lo que ves en Su Hijo a través de los ojos del ego es una demostración de que Su Hijo no existe. a Sin embargo, dondequiera que el Hijo esté allí tiene que estar el Padre. 5 Acepta lo que Dios no niega y ello te demostrará su verdad. 6 Los testigos de Dios se alzan en Su Luz y contemplan lo que Él creó. 7 Su silencio es la señal de que han contemplado al Hijo de Dios, y en la Presencia de Cristo no tienen que demostrar nada, pues Cristo les habla de Sí Mismo y de Su Padre. 8 Guardan silencio porque Cristo les habla, y son Sus palabras las que brotan de sus labios.
18. Cada hermano con quien te encuentras se convierte en un testigo de Cristo o del ego, dependiendo de lo que percibas en él. 2 Todo el mundo te convence de lo que quieres percibir y de la realidad del reino en favor del cual has decidido mantenerte alerta. 3 Todo lo que percibes da testimonio del sistema de pensamiento que quieres que sea verdad. 4 Cada uno de tus hermanos tiene el poder de liberarte si tú decides ser libre. 5 No puedes aceptar falsos testimonios acerca de un hermano a menos que hayas convocado falsos testigos contra él. 6 Si no te habla de Cristo, es que tú no le hablaste de Cristo a él. 7 No oyes más que tu propia voz, y si Cristo habla a través de ti, Le oirás.
sábado, 7 de mayo de 2022
IV. La herencia del Hijo de Dios
1. Nunca olvides que la Filiación es tu salvación, pues la Filiación es tu Ser. 2 Al ser la Creación de Dios, es tuya, y al pertenecerte a ti, es Suya. 3 Tu Ser no necesita salvación, pero tu mente necesita aprender lo que es la salvación. 4 No se te salva de nada, sino que se te salva para la gloria. 5 La gloria es tu herencia, que tu Creador te dio para que la extendieras. 6 No obstante, si odias cualquier parte de tu Ser pierdes todo tu entendimiento porque estás contemplando lo que Dios creó como lo que eres, sin amor. 7 Y puesto que lo que Él creó forma parte de Él, le estás negando el lugar que le corresponde en Su Propio Altar.
viernes, 6 de mayo de 2022
III. De las tinieblas a la luz
1. Cuando te sientas abrumado, recuerda que te has hecho daño a ti mismo. 2 Tu Consolador te proveerá descanso, pues tú no puedes proveértelo a ti mismo. 3 No sabes cómo hacerlo porque si supieras nunca habrías podido sentirte abrumado. 4 Si no te hicieras daño a ti mismo no podrías sufrir en absoluto, pues ésa no es la Voluntad de Dios para Su Hijo. 5 El dolor es algo ajeno a Él, ya que no sabe de ataques, y Su Paz te rodea silenciosamente. 6 Dios permanece en perfecta quietud, ya que en Él no hay conflicto alguno. 7 El conflicto es la raíz de todos los males, pues al ser ciego no ve a quien ataca. 8 Siempre ataca, no obstante, al Hijo de Dios, y el Hijo de Dios eres tú.
jueves, 5 de mayo de 2022
II. La invitación a curar
1. Si la enfermedad es separación, la decisión de curar y de ser curado es entonces el primer paso en el proceso de reconocer lo que verdaderamente quieres. 2 Todo ataque te aleja de esto, y todo pensamiento curativo te acerca. 3 El Hijo de Dios incluye tanto al Padre como al Hijo porque es a la vez Padre e Hijo. 4 Unir tener y ser es unir tu voluntad a la Suya, pues lo que Su Voluntad ha dispuesto para ti es Él Mismo. 5 Y tu voluntad es entregarte a Él porque, en tu perfecto entendimiento de Él, sabes que no hay sino una sola Voluntad. 6 Mas cuando atacas cualquier parte de Dios o de Su Reino tu entendimiento no es perfecto y, por consiguiente, pierdes lo que realmente quieres.
miércoles, 4 de mayo de 2022
I. Los regalos de la paternidad
1. Te has dado cuenta de tu necesidad de curación. 2 ¿Le ofrecerías entonces cualquier otra cosa a la Filiación, habiendo reconocido la necesidad que tú mismo tienes de ella? 3 Pues en esto estriba el comienzo del retorno al Conocimiento; los cimientos sobre los que Dios te ayudará a construir de nuevo el sistema de pensamiento que compartes con Él. 4 Ni una sola piedra que coloques sobre esos cimientos dejará de ser bendecida por Él, pues estarás restaurando la santa morada de Su Hijo, donde Él dispone que Su Hijo esté y donde está. 5 Sea cual sea la parte de la mente del Hijo de Dios en la que reinstauras esta realidad, la reinstauras también en ti mismo. 6 Moras en la Mente de Dios junto con tu hermano, pues la Voluntad de Dios no es estar solo.
martes, 3 de mayo de 2022
Capítulo 11 DIOS O EL EGO Introducción
1. O Dios está loco o bien es el ego el que lo está. 2 Si examinas imparcialmente las pruebas que ambas partes presentan, te darás cuenta de que eso tiene que ser verdad. 3 Ni Dios ni el ego proponen un sistema de pensamiento parcial. 4 Ambos sistemas son internamente coherentes, aunque diametralmente opuestos en todo, de tal modo que una lealtad parcial es imposible. 5 Recuerda también que sus resultados son tan diferentes como sus cimientos y que sus naturalezas fundamentalmente irreconciliables no pueden ser reconciliadas alternando entre ellos. 6 Nada que esté vivo es huérfano, pues la vida es creación. 7 Por lo tanto, toda decisión que tomas es invariablemente la respuesta a la pregunta: “¿Quién es mi padre?” 8 Y serás fiel al padre que elijas.